Alexis Kalergis: “La emergencia sanitaria ha puesto en relieve la necesidad de la ciencia”.

El inmunólogo, investigador del Consorcio BMRC y director del estudio de CoronaVac en Chile plantea que la colaboración que se ha producido a nivel científico en Chile "ha sido muy positiva y es un hecho sin precedentes en la historia de la ciencia".

Es probable que el bioquímico Alexis Kalergis sea lo más cercano a la cara del avance de la ciencia contra el coronavirus en Chile. Académico de la UC, doctor en Microbiología e Inmunología por el Albert Einstein College of Medicine de Nueva York y director del Instituto Milenio de Inmunología e Inmunoterapia, Kalergis tuvo a su cargo el primer estudio clínico de vacunas contra el Covid-19 en Chile. Se trata de las CoronaVac, del laboratorio chino Sinovac.

¿Cómo evalúa la colaboración que se ha producido entre los diversos organismos científicos en Chile?

Ha sido muy positiva y es un hecho sin precedentes en la historia de la ciencia. La colaboración y asociatividad científica, aunque ya existía, se vio potenciada por la pandemia, lo que facilitó el acceso y la visibilidad de los resultados de distintos grupos de investigadores y aumentaron las redes de cooperación. Por un lado, la microbiología, biología molecular y bioinformática han jugado un rol preponderante. Además, gracias a esta colaboración se han desarrollado en tiempo récord técnicas para el diagnóstico, que han permitido identificar a las personas contagiadas y así contener de forma oportuna la enfermedad. Por último, el trabajo conjunto de la inmunología mundial, con Chile participando activamente, ha permitido el desarrollo de vacunas seguras, inmunogénicas y eficaces, las que ya han sido aprobadas para uso de emergencia en muchos países, incluyendo el nuestro. Este trabajo ha implicado grandes esfuerzos por parte de la comunidad científica, pero también la dedicación plena de las diferentes agencias de gobierno y entidades regulatorias de cada país. Gracias a esta sinergia entre la ciencia, gobierno, sector privado y ciudadanía somos capaces de evidenciar uno de los avances científicos más notables de nuestra historia, que es el desarrollo en tiempo récord de vacunas seguras y efectivas.

¿Existe una disociación entre el esfuerzo científico y las decisiones de los gobernantes?

La emergencia sanitaria ha puesto en relieve la necesidad de acercar la ciencia a los tomadores de decisiones, para luchar contra la desinformación y promover que las definiciones sanitarias y políticas cuenten con la mayor cantidad de evidencia científica. Por eso son tan importantes las instancias de participación de la comunidad científica en actividades que permitan informar a los gestores de decisiones. Los ejemplos de Chile son la mesa social Covid-19 y algunas comisiones del Congreso, ya que en éstas la ciencia puede exponer los últimos antecedentes y la evidencia más robusta, junto con la participación de entidades gubernamentales, científicas, médicas y sociales. Finalmente, pienso que aquellos países donde la ciencia, los sectores público y privado, la política y la ciudadanía han establecido mecanismos articulados de trabajo y asociación, logran mayores avances en las estrategias de control de la pandemia. Ningún rubro puede por sí solo contra el coronavirus y por eso es tan importante el trabajo asociativo bien articulado.

¿Hay que vencer muchos egos profesionales en este tipo de investigaciones para lograr trabajar en conjunto?

Para obtener mejores resultados y acelerar la investigación de excelencia en una pandemia es necesario compartir resultados o evidencia científica obtenida por múltiples disciplinas en tiempo real. Este intercambio fluido de información beneficia el avance de la ciencia y esto, a su vez, a la sociedad, contrarrestando la información errónea por medio de pruebas científicas.

Fuente: La Tercera